
En el corazón de la capital, a lo largo del Lungotevere Via Capoprati, ha reabierto sus puertas Tagomago, un oasis de moda que recuerda a la isla de la diversión. Este bar de cócteles, inaugurado el año pasado, ofrece un ambiente festivo en la Ciudad Eterna.
Tagomago se inspira en una isla privada cercana a Ibiza, famosa por acoger a famosos. El local ocupa una superficie de 1.500 metros cuadrados y está dividido en tres zonas distintas. A la entrada, los invitados son recibidos por una zona con mesas de distintos tamaños, ideal para el aperitivo. A la derecha está la cocina, que ofrece una variedad de pizzas romanas, frituras y tapas.
La segunda zona está dedicada a la coctelería principal, amueblada con elegantes sofás, mientras que la tercera es una zona chill-out con sombrillas y tumbonas, que conduce a una pista de baile con una segunda barra. Al fondo del club hay un escenario privado con capacidad para unas 40 personas, una consola de DJ y otro bar privado con una carta de bebidas elaborada con vodka Altamura.
La colaboración con Crunch
El verano 2025 se ilumina con la colaboración entre Crunch, la famosa pizzería romana de Talenti, y Tagomago. La experiencia comienza a la hora del aperitivo, a partir de las 19 h, con una fórmula que combina cuatro tapas de autor de Crunch con una bebida, para un viaje entre los sabores españoles y la creatividad romana.
La cena continúa con las pizzas romanas de Crunch, divididas en fácil, media y dura según la riqueza de los ingredientes, y una selección de platos fritos de autor, entre los que destacan las croquetas ibéricas y la pizza de tomate con patanegra. La cocina permanece abierta hasta las 23.30 horas, pero para los más trasnochadores hay un rincón nocturno con pizza blanca, mortadela y fritos hasta la hora de cierre.
El restaurante abre todos los días de 18.30 a 2.30 entre semana y hasta las 3.00 los viernes y sábados. La entrada es gratuita. El amplio aparcamiento cercano facilita el acceso al local. Permanecerá abierto hasta mediados de octubre.
Dónde: Via Capoprati, Roma.