
Las piscinas naturales cerca de Roma ofrecen paisajes espectaculares con cascadas, pequeños lagos y aguas cristalinas, ideales para quienes buscan relajarse y sumergirse en la naturaleza.
Laghetto di San Benedetto (Subiaco)
Considerado uno de los paraísos naturales más fascinantes del Lacio, este lago verde esmeralda, alimentado por el río Aniene y rodeado de bosques, ofrece una experiencia de baño única a unos 70 km de Roma. La entrada cuesta 3 euros.
Hay 4 formas de llegar:
- A pie desde el centro de Subiaco, puede recorrer unos 2,5 km siguiendo un sendero desde el pueblo.
- Caminando desde el Monasterio de Santa Escolástica por el sendero señalizado ST2 (unos 2 km), que desciende hasta el río Aniene y bordea el pequeño lago.
- Desde los restos de la Villa de Nerón, desde donde un corto sendero conduce al estanque
- En coche, es posible aparcar en una zona habilitada cerca del comienzo del sendero (a unos 400 metros a pie del estanque)
Cascadas de Trevi
Las cascadas de Trevi, situadas en Comunacque, cerca de Trevi nel Lazio (provincia de Frosinone), son una de las maravillas naturales del Parque Natural Regional de los Montes Simbruini. Estas cascadas se encuentran justo antes de la confluencia del río Simbrivio con el Aniene y están inmersas en un exuberante entorno verde, con aguas cristalinas que desembocan en un pequeño lago situado más abajo, creando un sugestivo escenario ideal para excursiones y momentos de relax.
Cómo llegar a las Cascadas de Trevi
Se puede llegar a las cascadas a través del Sendero Turístico 1, que comienza cerca del puente de la carretera provincial 29 en dirección a Trevi nel Lazio. El sendero tiene unos 700 metros de longitud, es fácil y apto para todos los públicos, y serpentea a través de un paisaje natural.
Los que viajen en coche pueden tomar la autopista A24 desde Roma, salir en Subiaco y continuar por la carretera provincial 193 siguiendo las indicaciones hacia Trevi nel Lazio y Comunacque.
Cascadas de Monte Gelato
Las cascadas de Monte Gelato son una de las atracciones naturales más llamativas del Valle del Treja, en el municipio de Mazzano Romano, a unos 35 km de Roma. Este complejo natural se caracteriza por una serie de pequeñas cascadas formadas por el río Treja que fluye entre rocas volcánicas y frondosos bosques, creando un paisaje encantador. Es un lugar fresco, ideal para la época estival.
Las cascadas de Monte Gelato también han sido escenario de numerosas películas y anuncios publicitarios, entre ellos el famoso «Lo Chiamavano Trinità…» (1970).
Cómo llegar a las Cascadas de Monte Gelato
- En coche: desde Roma, tome la carretera Cassia bis Veientana hasta el km 35, después la salida de Mazzano Romano; desde aquí, siga las indicaciones hacia el Parque del Valle del Treja y Monte Gelato. Aparcamiento: de pago, cerca de la zona de acceso.
- A pie: un sendero fácil parte de la Mola di Monte Gelato y desciende hacia las cascadas, pasando por bosques de robles y zonas tobáceas. El sendero es apto para todos los públicos.
Cascadas de Pellico (Farnese/Canino) y Salabrone
Estas localidades, conocidas por sus piscinas naturales gratuitas, son ideales para los amantes de los balnearios salvajes y las cascadas, ya que ofrecen baños regeneradores en entornos naturales poco transitados.
Cómo llegar a la Cascada de Pellico
La cascada se encuentra a 1,5 km del centro de Canino y se puede llegar en coche o a pie. En coche, desde Canino tome la Via d’Ischia, continúe recto, ignorando los dos primeros desvíos a la derecha, hasta encontrar una carretera a la derecha que conduce al puente sobre el arroyo Timone. Desde aquí, siga un corto sendero de unos 50 metros para llegar a la cascada. Es aconsejable aparcar en las inmediaciones y recorrer a pie este último tramo. Como alternativa, se puede llegar a la cascada caminando desde la fuente del matadero de Canino, siguiendo el curso del arroyo Timone.
Cómo llegar a la Cascada del Salabrone
Se encuentra cerca de Farnese, también en Tuscia, y se puede llegar a ella por rutas de senderismo que atraviesan la campiña y los bosques de los alrededores. Desde Farnese, se puede seguir un sendero señalizado que conduce a la cascada, inmersa en un entorno natural virgen.