Con la llegada del frío, aumentan las ganas de refugiarse y comer platos calientes tradicionales delante de una chimenea. En Monte Livata podrá degustar platos caseros trufados con unas vistas de locura a las montañas. Hablamos de Grammo, la Cueva de la Trufa, un restaurante familiar que lleva las trufas locales a la mesa (los propietarios son buscadores de trufas). Una actividad llevada a cabo con pasión y documentada por las diversas fotografías que cuelgan en el restaurante.
La Grotta tartufi recuerda a un pequeño chalet de montaña amueblado con estilo, y también se pueden encontrar objetos especiales expuestos, así como numerosas botellas de vino y champán.
En cuanto al menú, se pueden pedir fettuccine, lasaña, huevo trufado, queso trufado y carne trufada… Todo huele a trufa en la Grotta. Una guarnición que hay que probar es el papaciucco, un plato tradicional sublacense preparado con col negra y patatas (¡sublime!).
Grammo abre de miércoles a domingo, viernes y sábado para comer y cenar. Y se encuentra precisamente en Viale dei Boschi, 10, 00028 Livata (RM). Para reservas: 329 217 6666.
Monte Livata: qué hacer
El Monte Livata es una montaña situada en la cadena de los Montes Simbruini, en el Lacio, a unos 15 km de Subiaco y 80 km de Roma. Con una altitud que oscila entre los 1.300 y los 1.855 metros, se le conoce como «la montaña de Roma» y es la única estación de esquí del área metropolitana de la capital. Es un lugar donde se puede disfrutar de actividades al aire libre durante todo el año; un destino ideal para familias, deportistas y amantes de la naturaleza.
En invierno, el Monte Livata es popular para esquiar y pasear con raquetas de nieve. En verano, en cambio, se convierte en un paraíso para senderistas, ciclistas y jinetes. Es habitual ver animales en libertad entre las extensiones de terreno, a veces incluso en la calle entre aparcamientos. Una de las principales atracciones es la pista de trineo, una vía férrea rodeada de naturaleza que entretiene a grandes y pequeños. Una visita obligada.