El Lacio es precioso y a menudo nos olvidamos de los característicos pueblos que se extienden por toda la región. Este invierno, explore las tradiciones de los encantadores pueblos medievales, escape un rato de la gran ciudad y viva las fiestas de una forma más tradicional. Entre belenes vivientes, mercadillos navideños ymuseos del juguete, estas Navidades no deje pasar la oportunidad de visitar estos 5 increíbles pueblos del Lacio.
Tabla de contenidos
1. Greccio sorprende con su tradicional belén viviente
Greccio es un típico pueblo medieval italiano, increíblemente bello y rico en historia. Pero, ¿qué lo hace tan especial en Navidad? Allá por 1223, tras un viaje a la tierra de Jesús, San Francisco llegó a Greccio y decidió recrear una representación de la Natividad, creando el primer belén. Desde entonces, cada 24 de diciembre, uno de los belenes vivientes más grandes de Italia cobra vida en el encantador pueblo del Lacio, rodeado de mercadillos navideños y vistosas decoraciones, continuando la antigua tradición popular.
El encantador pueblo está a unas dos horas en coche de Roma, pero también se puede llegar en tren desde la estación Termini de Roma. El tren tarda aproximadamente una hora y cincuenta minutos en llegar a Greccio y el precio del billete es muy asequible, lo que lo convierte en un viaje al alcance de todos.
2. Cuentos de luz» en Gaeta
Si pensabas que Gaeta no podía ser más espléndida, te equivocabas. Como cada año por Navidad, Gaeta organiza un increíble espectáculo de luces por toda la ciudad. Este año el tema será el mar, en honor a sus orígenes como república marítima, y será posible ver sirenas y olas de luz brillando a lo largo de las calles principales. «Fábulas de luz» iluminará la pintoresca ciudad de la provincia de Latina del 9 de noviembre al 12 de enero, proporcionando emociones que harán brillar los ojos de todos los visitantes.
Llegar a Gaeta desde la capital no es complicado. De hecho, es posible llegar al pueblo en coche -en poco más de dos horas- o en tren -que sale aproximadamente cada media hora de Roma Termini-. Este invierno, sumérjase en un mundo de luz en uno de los pueblos más bellos de Italia y viva una experiencia centelleante.
3. Collalto Sabino, el segundo hogar de Papá Noel
Dar la vuelta al mundo en una noche puede ser agotador y Papá Noel lo sabe bien. Por eso, desde hace algunos años, Papá Noel elige algunos de los lugares más bellos como estaciones mágicas donde descansar un poco. Collalto Sabino se ha convertido así en el «pueblo de Papá Noel«, donde cada año, para hacerle sentir como en casa, todo el pueblo se decora y engalana con temas navideños, mercados tradicionales, delicias festivas y árboles de Navidad en cada esquina.
Desde hace años, la villa medieval se ha transformado en un pueblo encantado, donde el ambiente navideño se respira en sus calles, repletas de puestos con productos artesanales perfectos para regalos navideños únicos. Se puede llegar a Collalto Sabino en aproximadamente una hora en coche desde Roma, pero también se puede llegar en tren hasta Carsoli, y luego seguir en el autobús F8688 hasta su destino. Si tiene suerte, ¡podría incluso dar un paseo en el trineo de Papá Noel!
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4. Fiuggi es el taller de carpintería de los duendes
¿Dónde se hacen todos los regalos de Navidad? Las fábricas del Polo Norte se habían quedado pequeñas, así que los elfos de Papá Noel trasladaron parte de su producción a Fiuggi, que se ha convertido en el «taller de carpintería de los elfos». Situada en las laderas de los montes Ernici, además de ser una importante ciudad balneario, esta localidad es conocida por su artesanía y carpintería. Durante el periodo festivo, se pueden encontrar objetos especiales elaborados con piezas de madera cuidadosamente trabajadas por manos expertas.
A lo largo de los años, los duendes han fabricado grandes cantidades de juguetes y hoy en día algunos se conservan en el impresionante museo del juguete. Este museo único alberga una extraordinaria colección de juguetes de diferentes generaciones. Una actividad nostálgica y emocionante, a una hora y media en coche desde Roma o a dos horas en tren y autobús desde la estación de Termini.
5. Ariccia acoge el «parque de los cuentos encantados
Durante las fiestas, en Ariccia no será difícil encontrarse con duendes deambulando por las calles o princesas paseando por el Parque Chigi. El «parque de los cuentos de hadas encantados » regresa a la bella ciudad con un recorrido iluminado de cerca de un kilómetro, a lo largo del cual será posible encontrar a los personajes más famosos de los cuentos de hadas, iluminados por miles de luces de colores.
Pero los protagonistas de las historias fantásticas más conocidas no serán los únicos presentes ; Papá Noel y sus mágicos ayudantes también estarán en Ariccia durante las fiestas. Los más pequeños -y no sólo ellos- podrán hablar con Papá Noel y hacerse fotos de recuerdo. Se puede llegar fácilmente a Ariccia desde Roma, a menos de una hora en coche de la capital, lo que le catapultará al resplandeciente parque de cuento de hadas en sólo 45 minutos.
