En el primer cuatrimestre de 2024, según datos del INAIL, aumentaron un 17,9% las denuncias por enfermedades profesionales relacionadas con trastornos psicológicos y del comportamiento en comparación con el mismo periodo de 2023. Este aumento se atribuye a factores como las dificultades para conciliar la vida personal y laboral, la falta de desarrollo profesional, las cargas de trabajo excesivas, el entorno hostil y el mobbing. Si no se abordan, estos problemas pueden provocar estrés, trastornos psicológicos y síndrome de burnout.
Los datos recogidos por Unobravo (un sitio web de terapia en línea) muestran un aumento del 109,7% en el número de personas que experimentan malestar psicológico en el trabajo en los primeros cuatro meses de 2024 en comparación con 2023. En el Lacio, a escala regional, la demanda de apoyo psicológico relacionado con el trabajo representa el 10,6% del total nacional. La ciudad metropolitana de Roma es una de las zonas con mayor número de solicitudes de ayuda, con un 8,2% del total de solicitudes procedentes de allí. Es la segunda en Italia, después de Milán, seguida de Turín.
La mayoría de las solicitudes de apoyo psicológico proceden de mujeres (66,3%) y de personas en la primera fase de su carrera laboral, con edades comprendidas entre los 25 y los 34 años. El estrés laboral se manifiesta con síntomas como fatiga física y mental, desmotivación y sensación de inadecuación. Entre las causas figuran los problemas de relación con compañeros y superiores, la carga de trabajo, la mala comunicación y el acoso. Sin intervención, el estrés puede convertirse en síndrome de burnout.
¿Qué es el burnout?
El burnout se define por síntomas psicológicos (como irritabilidad y disminución de la motivación), físicos (como dolores de cabeza y trastornos gastrointestinales) e inespecíficos (como apatía y trastornos del sueño). La enfermedad se desarrolla en cuatro fases: entusiasmo, estancamiento, frustración y desconexión. Reconocer estas fases es crucial para intervenir y prevenir el Burnout, a menudo con la ayuda de psicólogos o psicoterapeutas, afirma Unobravo.