Roma en la clasificación final de la calidad de vida en Italia
En la edición de 2024 de la encuesta sobre Calidad de Vida del Sole 24 Ore, Roma ocupa el puesto 59, una clasificación en la que destacan algunos aspectos críticos en comparación con otras grandes ciudades italianas y el noreste en general. A pesar de su importancia como capital italiana y centro cultural y político, Roma parece sufrir algunos problemas estructurales que penalizan su clasificación.
Problemas económicos y sociales
Uno de los principales factores que influyen negativamente en la posición de Roma es el coste de la vida, especialmente el de la vivienda. El alquiler de un piso (tipo apartamento de dos habitaciones) en una zona semicéntrica de Roma es extremadamente elevado, representando el 81% de la renta media declarada. Esta cifra pone de manifiesto una importante presión económica sobre los residentes, que dificulta la accesibilidad al mercado de la vivienda.
Además, la diferencia entre las rentas más altas y las más bajas es preocupante. En Roma, los contribuyentes más ricos ganan 15,4 veces más que los más pobres, un indicador que subraya las desigualdades económicas dentro de la ciudad.
Impacto del turismo y la delincuencia
Roma, al ser uno de los destinos turísticos más populares del mundo, también se enfrenta al impacto negativo de la gran afluencia de visitantes. El Índice de Delincuencia, que relaciona las denuncias por población residente, penaliza las zonas con gran afluencia turística. Esto contribuye a empeorar la percepción de seguridad entre los residentes y puede afectar a la calidad de vida percibida.
Tendencias demográficas
A excepción de Milán y Bolonia, las grandes ciudades han registrado un descenso de residentes en el último año, señal que podría indicar una migración a zonas con un menor coste de la vida o una percepción de mejor calidad de vida. Esta tendencia al descenso demográfico en las grandes ciudades se ve agravada por las dificultades de acceso al mercado inmobiliario y las tensiones económicas.